Check

¡No tienen vino!

Francisco García

Publicado 15/10/2019

Comparte
   



Has pasado por alguna necesidad, en algún momento te ha faltado algo en tu vida diaria o en alguna actividad.

¿Es importante la familia para Jesús? ¿Le importan los detalles? Veamos, en el evangelio de Juan capítulo 2, encontramos un relato interesante.

En primer lugar hay una fiesta de bodas y por su puesto Jesús, su madre  y sus discípulos se encontraban en esa fiesta. Notas que están compartiendo como una familia, esa es la primera impresión que me da al leer ese texto, apartar tiempo para las cosas importantes como la familia.

En el mundo actual en que vivimos, muchas veces ya no tenemos tiempo para dedicarlo a la familia o a los seres queridos. Estamos tan preocupados y tan atareados que apenas tenemos tiempo para nosotros.

Te identificas con esta rutina, suena la alarma, te levantas, te bañas, desayunas algo (si es que te da tiempo), sales a tomar el bus o a conducir en el tráfico, llegas al lugar de trabajo, pasas 8 o más horas allí, sales de nuevo al tráfico y regresas a casa, cenas, estás tan cansado que te duermes. Y esa rutina se repite día tras día durante toda la semana.

¿En qué momento te detienes? Nunca, porque si nos detenemos hay un desbalance, al menos eso es lo que nos tratan de introducir en la mente.

¡Para! Toma un respiro y medita en el tiempo que has ocupado en otras tareas y no se lo has dedicado a tus seres queridos, Jesús se encontraba con sus discípulos disfrutando de la fiesta, compartiendo con familiares y amigos.

¡Horror! Ya no hay vino, que va a pasar ahora, a donde va a quedar la reputación de la nueva pareja de la familia, ¡un momento! Jesús está allí.

Notaste eso, en esa fiesta estaba Jesús, quizás en tu vida no te encuentres disfrutando de una fiesta, quizás en este momento estas pasando un problema serio, una enfermedad, una separación, luto, perdida de trabajo, cualquier cosa que te puede quitar la paz.

Reflexiona, por un instante, aunque Jesús estaba allí, hubo un problema, no estamos exentos de problemas, o libres de situaciones malas, siempre hay posibilidad de pasar por una mala situación. Pero Jesús está allí, “Llenad de agua estas tinajas” (Juan 2:7) te das cuenta que Jesús es práctico, él tiene una y mil formas de solucionar las dificultades, quizás la solución que nos ofrezca no siempre va a ser la que nos gusta, pero siempre está allí para sacarnos del apuro.

¿Agua? Por su puesto, “…Tú has reservado el mejor vino hasta ahora” (Juan 2:10) y el problema se solucionó.

Quiero que entiendas estos dos puntos, primero Jesús dedicaba tiempo para compartir en familia, segundo, cuando él está en medio de nosotros, de una u otra forma se va a solucionar las dificultades.

Te invito hoy a que puedas invitarlo a tu casa, con tu familia, comparte a Jesús con los tuyos, ya que cuando falte el vino, Jesús te dará el agua de vida.


Deja un comentario